-¿Qué antigüedad tiene la empresa?

Wúru se fundó en 2018.

Los cofundadores somos:
Luciano Muratore: cofundador y Sales VP
Ignacio Arata: cofundador y COO
Hugo Pallaoro: cofundador y CTO
Luciano Tourn: cofundador y CEO

-¿Cómo fueron sus comienzos?

Los cuatro fundadores de Wúru llevamos diez años trabajando en el sector. Todos provenimos de alguna manera del área de salud. Por esa razón, conocíamos de cerca las dificultades de las instituciones médicas. Nos dimos cuenta de que los profesionales de la salud estaban saturados de las tareas administrativas y que esto repercutía también en la experiencia de los pacientes (por ejemplo, en la demora en recibir un turno para una consulta o en el tiempo de espera cuando se acercan al consultorio). Para los prestadores médicos, resolver este tipo de cuestiones se convirtió en una prioridad. 

Parte del nacimiento de Wúru tiene que ver con que hace algunos años, la principal responsabilidad de mi trabajo era gestionar el Grupo Gamma de Rosario. Allí trabajamos en la digitalización de todo el paso del paciente por la institución. A pesar de que toda esa información estaba ingresada al sistema, menos del 5% de todos estos datos se usaban para tomar decisiones que mejoraran el nivel del servicio y optimizaran recursos. De alguna manera, la intuición seguía rigiendo ese tipo de responsabilidades. Entendimos que esta situación generaba una sobrecarga de trabajo en los profesionales médicos, además de provocar un desperdicio de recursos. Y esto no estaba pasando solo en algunos hospitales, estaba pasando en todo el sistema de salud. De ahí surgió la idea de formar Wúru.

La lectura que hicimos se alinea además con las directrices trazadas por la OMS en 2019, que apuntan a aprovechar las posibilidades que las tecnologías pueden ofrecer a los trabajadores sanitarios para mejorar la gestión de las instituciones y reducir el estrés que provocan las tareas administrativas a los profesionales y que hoy ocupan el 70% de su tiempo. Estas directrices subrayan que los sistemas de salud deben comenzar a trabajar con los datos que producen para tomar decisiones más eficientes. Además, proponen que se garantice la estabilidad de sus estructuras y la capacitación tecnológica necesaria para que el personal médico pueda ser parte de esta transformación. 

-¿Qué actividad desarrolla y cómo genera valor?

Wúru opera en la intersección entre la salud y la tecnología. Nuestra misión es explotar el potencial de esos datos que permanecen inactivos, aplicando inteligencia artificial y machine learning, para lograr la excelencia operacional en los prestadores de salud. De esta forma, buscamos impactar de forma directa sobre las cancelaciones, la capacidad subutilizada, las ausencias, las esperas y otras tantas fricciones dentro del itinerario del paciente que hoy llevan a desperdiciar 3.6 trillones de dólares por año. Este ahorro es un impacto económico pero también social, ya que colabora para que la atención médica sea cada vez más accesible para toda la comunidad.

Nuestra compañía es un software as a service (SaaS). Esto significa que no demanda la instalación local sino que se consume en la nube, desde el browser o el teléfono. Así, Wúru cobra un abono o fee mensual que varía de acuerdo al tamaño del hospital y la cantidad de productos que utilice. 

Nuestra empresa dedica esfuerzos y recursos a investigar y desarrollar para mejorar las funcionalidades del producto. Nos enfocamos en optimizar la precisión de nuestros algoritmos y la efectividad de las recomendaciones. Se trata de una inversión mucho mayor a la que podría realizar un hospital por sí solo, que además se puede nutrir de los datasets de otros prestadores. De esta manera, la tecnología permite distribuir esta inversión entre múltiples clientes con un costo marginal por implemental relativamente bajo, y por eso es un negocio con alto potencial en la medida que logre capturar un porcentaje relevante de los prestadores de salud en toda la región.

Lo que hace Wúru es consolidar todas las marcas que va dejando el paciente en su itinerario de atención. Así, permite estimar de forma precisa la duración de estudios y procedimientos, evitar cancelaciones y atrasos, maximizar la utilización de los equipos y distribuir de manera eficiente los recursos. Todo esto se realiza a través de modelos de analítica de datos que se enriquecen con cada implementación y presentan recomendaciones cada vez más precisas, basadas en el aprendizaje de las mejores prácticas alrededor del mundo, que le llegan a los profesionales como pautas de acción concreta, en la palma de su mano, directo a su celular. De esta forma, Wúru genera hasta seis veces un retorno de la inversión anual en mayor utilización de todos los recursos que tiene el hospital, desde quirófanos a equipamiento médico, hasta espacio físico de las camas. 

Además de la mejora que Wúru puede significar en la experiencia del paciente y de la optimización de recursos que puede generar en el prestador médico, nos interesa destacar cómo puede impactar en la rutina de quienes trabajan en un hospital. Por ejemplo, si pensamos en un enfermero o enfermera que todos los lunes se despertaba a las cinco de la mañana para asignar de la mejor manera el staff en las cirugías de la semana y gracias a Wúru ahora puede comenzar su jornada más tarde, podemos ver un ejemplo muy concreto de impacto positivo en el personal sanitario. 

-¿Cuál fue el mayor logro alcanzado?

Hitos tecnológicos
Hubo varios, de distinta índole. En lo que tiene que ver con el desarrollo tecnológico, el primer hito fue poder ir de un producto descriptivo a uno prescriptivo. En nuestras primeras implementaciones, Wúru describía el problema: poníamos un dashboard, indicadores. De esa forma, permitíamos saber el nivel en el que se estaba usando el quirófano, si se estaba usando poco, si se cancelaban muchas cirugías, si había atrasos, si las cirugías estaban mal estimadas. Podías saber lo que estaba pasando y diagnosticar en algún punto por qué estabas estimando mal el uso de los recursos, incluso saber qué grupo de profesionales tienen tendencia a sobreestimar ese uso o si se usa poco el espacio porque hay un montón de reservas que no se utilizan y están bloqueadas hasta último minuto. Además de todo eso, insisto, podías diagnosticar por qué. Toda esa primera parte implicó describir y tenía funciones de gran utilidad, pero nos dimos cuenta de que las instituciones en un punto empezaban a requerir otra cosa. Ya sabían cuál era el problema y cuál era la oportunidad, entonces necesitaban predecir cuándo esto iba a pasar de vuelta y qué acción podían tomar para ajustarlo. Ahí empezamos a movernos a soluciones como el Agendamiento inteligente, que lo que hace es tratar de predecir cuándo va a haber una baja utilización de un bloque quirúrgico, cuándo va a haber un atraso y por qué, si es porque hay una tendencia a estimar mal el tiempo de una cirugía o porque la predicción indica que en general el procedimiento suele tardar la mitad del tiempo efectivamente reservado. Así, te permite ajustar horarios en el sistema para calcular una duración más acorde a la realidad, basada en los datos que se tomaron previamente. De esta forma, la persona encargada de gestionar la agenda puede pedir al agendador o al cirujano que libere determinado bloque de tiempo para poder asignarlo rápidamente con un mensaje a un cirujano con más chance de usar efectivamente ese espacio.

Hitos financieros y comerciales
Algunos de nuestros clientes más importantes son Swiss Medical (Argentina) y Grupo Auna (Perú). Además, trabajamos con importantes compañías de prestación médica de España y Colombia. Comenzar a trabajar con cada uno de ellos fue un hito, porque supuso un crecimiento y una expansión para Wúru. Además, hace pocos meses comenzamos a trabajar en un hospital público argentino, que definitivamente fue un logro para la compañía, ya que significa un avance enorme en nuestro principal propósito. Este paso implicó acceder a la posibilidad de optimizar procesos y recursos del sistema de salud con un nuevo alcance, en un hospital que cuenta con un grado de informatización que pocas instituciones de Latinoamérica tienen.

Por otra parte, podemos considerar hitos una ronda pre seed de inversión en la que participamos en 2021 y una ronda seed de 2022. La primera fue liderada por Kalei Ventures y seguida por los fondos Ciro Ventures, Promedon Group, Bonim Corp e Incutex. En tanto, este año, participamos de una ronda seed liderada por Meridian Street Capital.. Meridian fue acompañado por otros dos fondos institucionales que ya habían participado de la ronda anterior: Ciro Ventures and Bonim Corp, además de algunos inversores ángeles con amplia experiencia en el ámbito emprendedor y tecnológico como Gastón Frydlewski, co founder de Hickies y Whyline,  y Ana Torrontegui, COO de Jampp. Estos fondos se destinarán a cumplir uno de sus objetivos estratégicos de Wúru: su consolidación internacional. Además, se utilizarán para la incorporación de nuevos talentos y el desarrollo de la nueva versión de su producto, que profundiza en la automatización de procesos para detectar oportunidades y trazar planes de mejora

-¿Qué valores identifican a la empresa?

En Wúru trabajamos para que la salud de alta calidad sea accesible para todos. Ese propósito lo perseguimos a través del diseño y la orquestación de un nuevo sistema de atención médica basado en datos que permitan maximizar su valor.

- Qué opina de la sustentabilidad y responsabilidad social empresaria.

Opino que hay una idea de la responsabilidad social empresaria vinculada con compensar el impacto negativo que puede tener la empresa en la comunidad. Yo creo que la situación ideal es cuando la empresa en su misión y propósito tiene generar un impacto positivo en la comunidad, y al mismo tiempo ser rentable haciéndolo. Es el caso de Wúru, que busca una salud eficiente y accesible para todas las personas. Nuestra responsabilidad social y nuestra misión son una sola cosa.

-¿Cuál es el mercado en el que se ofrece su producto o servicio?

Wúru se inscribe en el segmento healthtech, al que pertenecen unas 51 empresas en Argentina, según un relevamiento de Endeavor. Dentro de ese segmento hay varias actividades, como Software y Servicios médicos, en la que se puede ubicar a nuestra compañía. 
Wúru tiene como mercados objetivos los de Latam y España, con un tamaño total de aproximadamente 3 mil millones de dólares.

-¿Qué opina del valor productivo de Rosario y la Región?

Aspiro a que Rosario sea un hub de la economía del conocimiento. Tiene el caso de Bioceres, y puede tener muchos más en el polo tecnológico que se creó en el Idear. El ecosistema tiene mucho para crecer.

¡Agradecemos a Luciano por participar de Valor Productivo!